¿QUIEN “HACE” LAS FOTOS?
Ya hace tiempo que no filosofo sobre
fotografía en el blog. Estoy retomando las publicaciones y viendo
algunas cosas por facebook, sobre cambios de sistema, de marcas, de
formatos en fotografía, voy a hacer algunas reflexiones.
La cámara es muy importante, tanto que
sin ella no podemos registrar las fotografías en un soporte, sea
película o sensor digital (transferido a la tarjeta de memoria) Y
muchas veces le damos tanta importancia que nos olvidamos de que
detrás de la cámara hay una mente pensante. No hay que estudiar
tanto el resultado como el proceso.
A veces suele pasar sobre todo en el
mundo de los aficionados. Se compran una cámara, hacen unas fotos y
entonces viene la decepción. Mucho contraste entre sombras y luces.
O sombras sin detalle. O luces sin información. Y una cosa que pasa
a menudo. La cámara o el objetivo no “enfocan” bien. No hacemos
más que probar con un amigo o amiga. Con familiares y no sale a foco
nada. Y probamos con otro objetivo, un poco mejor. Pero la cosa no
mejora. En esas circunstancias en un alto porcentaje de casos, la
culpa no es de la cámara o del objetivo. Quizá estemos disparando
en automático y a lo mejor hay poca luz. Y el obturador dispara
lento. Con lo que damos una pequeña (o grande) trepidación a la
toma. O enfocamos y movemos un poco la cámara y reenfoca por lo que
perdemos el primer punto de foco. También es normal dejar los puntos
de autoenfoque que hagan todo automáticamente. Y enfocan donde
quieren no donde queremos nosotros (normalmente en el sujeto más
cercano o el más grande) Si se quiere sacar una foto sin
trepidación. Es aconsejable disparar un punto por encima de la focal
en formato completo. Si tenemos un 35mm en DX (APS) nos equivaldrá
en Nikon a un 52 mm. Pues si no queremos sorpresas disparar al menos
a 1/60 s. Si se dispara a 1/125 mejor. Y si la cámara es de formato
completo con un 35 mm podríamos disparar a 1/60s, lo más aproximado
es 1/30s pero ya estamos por debajo del límite. Eso o usar trípode,
en el caso de que el motivo esté también inmóvil. En las demás
focales, pues igual. Me diréis, pero si uso un 300 mm ¿Hay que
disparar a 1/400 s. Pues sí, por eso es mejor que esté estabilizado
o sea luminoso. Cualquiera de las dos cosas, o las dos a la vez. Nos
facilitará la captura. Los estabilizadores nos son mecanismos
mágicos. Si te dicen que con un 200 mm puedes disparar a 1/15 de
segundo no te fíes en demasía. Los fabricantes suelen ser muy
optimistas. Un estabilizador puede reducir uno o dos puntos (en este
caso 1/60s-dos pasos-) la velocidad. Si arriesgas más puede que tu
foto siga saliendo trepidada. Los puntos de enfoque es conveniente
seleccionarlos manualmente. Según lo que deseemos enfocar. Te han
hablado en cursos y tutoriales de enfocar en un sitio y reencuadrar
en otro. No es muy aconsejable. Sobre todo si los dos puntos (donde
enfocas y luego donde reeencuadras) no están en el mismo plano (a la
misma distancia paralela a la cámara) es otra causa de desenfoque
sobrevenido.
En cuando a los contrastes de sombras y
de luces. No hay una solución mágica. Pero ahora muchas cámaras
tienen unos ajustes que “amplían” el rango dinámico.
Normalmente aclaran las sombras con lo que ya ganamos, las luces
tienen más margen gracias a esto. Si tu cámara no tiene estos
ajustes dos consideraciones. O bien no dispares cuando haya luz
demasiado dura (mediodía) O bien elige sombras o luces. Lo que más
quieras destacar. Si te interesan luces mide y ajusta a las luces. Si
te interesan sombras mide y ajusta a las sombras. Hay otra forma
medir luces y sombras y fijar unos ajustes intermedios. Pero es como
decir que lo quieres todo. Algo tendrás que sacrificar.
Decir que la cámara y los objetivos
son inertes. No piensan. Ahora muchas cámaras tienen muchos ajustes
informáticos, son pequeños ordenadores y los dichosos algoritmos
que “adivinan” y sugieren que hagamos cosas determinadas. Pero
eso suelen ser automatismos. Que funcionan en condiciones de no mucho
contraste o escenas normales. Aunque no siempre aciertan.
Luego sí, hay objetivos que están mal
calibrados, o cámaras con “Back Focus” o “Front Focus” y
hasta eso tiene solución leyéndose el manual. Aunque estos
desajustes suelen ser minoritarios. Las cámaras y objetivos son como
relojes con mecanismos de precisión. Pueden salir algunos malos.
Pero como digo suele ser la excepción.
Es
muy común echarle la culpa a la cámara de que nuestras fotos salen
peor de lo que quisiéramos. Se cambia de cámara, se cambia de
objetivos, se hacen mil historias. Y las fotos siguen saliendo mal o
de distinto modo al deseado. Una cosa, la cámara solo es
"responsable" de registrar la imagen. Todo lo que se haga
antes de registrarla es potestad del fotógrafo. El fotógrafo
encuadra, mide la luz (o lo pone en automático) compone. Decide si
dispara una o más fotos, para asegurar o tener variedad. Puede ir a
un sitio o ir a otro (la cámara te acompañará siempre que la
lleves) Decide si la luz es buena o por lo menos adecuada a lo que
quiere conseguir. Bueno y una lista inmensa de cosas que tenemos que
hacer los fotógrafos. Si haces todo esto lo mejor posible, lo más
probable es que tengas una imagen buena. Cuanto mejor sea el sensor y
las ópticas puede que mejore un tanto. Pero no fíes el resultado a
la herramienta. Una buena foto hay que trabajarla, con la cámara que
tengas en ese momento. Y la tendrás que trabajar igual si la cámara
es "buena", "regular" o "mala".
Lo
dicho tenemos que confiar menos en que las máquinas hagan el trabajo
solas por nosotros. Incluso aunque se disparé por control remoto,
antes deberás haber elegido un encuadre. Si disparas al cielo y esta
despejado no saldrá nada.
Juan
Gregorio García Alhambra
Fotógrafo
Profesional
FOTO
digitalhambra
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